Memorias de África Todo comenzó un sufrido día noruego, compartía secuestro con un alegre sudafricano que me contaba lo amables y friendlys que eran los granjeros en su pais. Posteriormente, entre cerveza y cerveza, en uno de esos múltiples días cancelados, cometió la irresponsabilidad de invitarme a participar en su campeonato nacional. - Tienes que venir, allí se vuela todos los días, techos de miles de pies y térmicas brutales. Umm. Bueno, me lo pensaré.No me lo pensé mucho, el 26 me planto en Johanesburgo y allí están esperándome Mannie Mclaujan y Thorsten.